Primero nos vetaron en Fitur, ahora nos dejan sin promoción.
A los pueblos pequeños nos están silenciando, y es una realidad, una vez más se pone de manifiesto el abandono por parte de Diputación y Conselleria a los municipios de interior tras la pérdida de una subvención clave para la visibilidad turística
La reciente pérdida de una subvención de 300.000 euros por parte de la Diputación de Alicante, destinada a un plan de marketing para difundir los recursos turísticos de la provincia, subvención fundamental y de visibilidad, ha desatado un cruce de acusaciones entre la Generalitat Valenciana y el ente provincial. Sin embargo, para municipios como Tibi, esta “guerra de versiones” tiene un impacto muy real: el silencio institucional y la invisibilización de los destinos rurales.
“Es muy grave que los municipios más pequeños paguemos las consecuencias de una mala gestión política entre administraciones que deberían coordinarse. No es solo dinero, es visibilidad, es desarrollo local, es futuro.”, pone de manifiesto la Concejala de Turismo, Pilar Fernández
De Fitur al olvido
La sensación de abandono no es nueva. En enero, durante la feria internacional de turismo Fitur, ya se impidió a muchos municipios mostrar sus materiales promocionales, rompiendo una tradición consolidada en el tiempo. 255.000 personas asistieron al evento y los pueblos de interior como Tibi fueron apartados.
“Nos dejaron sin espacio en el mayor escaparate turístico del país. Y ahora también se cargan la campaña de promoción provincial. ¿Cuál es el siguiente paso? ¿Cerrar nuestras oficinas de turismo?”
¿Quién responde por esta pérdida?
La subvención perdida era fundamental para el plan de marketing que gestiona el Patronato Costa Blanca, y por extensión para Tibi. Desde la Diputación apuntan a que fue Turisme Comunitat Valenciana quien no aprobó el plan. Desde la Generalitat acusan a la Diputación de no cumplir los trámites ni justificar los gastos.
Mientras los gobiernos se tiran la pelota, los únicos perjudicados son los municipios, especialmente los de menor población y con presupuestos limitados.“No podemos competir con Benidorm, pero sí podemos ofrecer algo distinto: tranquilidad, naturaleza, historia. Pero eso necesita promoción y apoyo institucional. No se puede hacer turismo rural a pulmón”.
“No es un fallo administrativo. Es una decisión política. Cuando se ningunea al turismo de interior se nos está negando una parte de nuestra identidad y nuestro desarrollo.“
El presidente Mazón ya demostró en la Diputación su falta de visión territorial. Y ahora repite errores desde la Generalitat. Gestionar el turismo no es repartir carteles, es cuidar a quienes hacemos territorio